En Europa, Franco Orocito crece a fuerza de sacrificio y trabajo

Lejos de casa, de los afectos, pero bien cerca de su pasión y persiguiendo un gran sueño: el de ser profesional en el deporte que tanto ama y por el que tanto se sacrifica. Con apenas 20 años, el ciclista roquense Franco Orocito ya no es el mismo que brilló en Juegos Epade, Juegos de la Araucanía y en tantas competencias regionales y nacionales. Se lo nota más maduro, cada vez más profesional, pero sin dejar la sencillez y humildad que lo caracterizan desde muy chico. En su tercera temporada en el ciclismo europeo, viene de competir en Polonia, dejando todo y sumando una gran experiencia con la camiseta del D´Amico UM Tools. El desafío de cuatro etapas, en el clásico CCC Tour Grody Piastowskie, 2.2 de la UCI, no pudo ser completado, pero el balance fue más que positivo.

“Fue una competencia dura, exigente, pero que dejó satisfacción y mucho aprendizaje. Estoy contento y muy agradecido al equipo me está dando la chance de correr muchas pruebas en Sub23 y Elite que me permiten seguir creciendo. Es muy lindo poder medirse con grandes equipos, grandes ciclistas y vamos sumando experiencia, creciendo cada día un poco más”, contó Orocito desde Italia, país que hace tres años lo recibe de la mejor manera, en charla con Manantial Deportivo Radio por la 97.1 Estación Diez.

Franco ya sumó varias pruebas en suelo italiano, también mostró su muy buen nivel en Serbia y Bosnia y entre el jueves 9 y domingo 12 dio lo máximo en Polonia.

“No es fácil estar lejos de los afectos, de la familia, pero desde lo deportivo estoy haciendo lo mejor posible, cuidándome, aprendiendo, entrenando mucho y aprovechando todo para seguir creciendo. En Polonia fueron tres días intensos, con cuatro etapas. La critérium no influyó en la clasificación, pero fue el comienzo y sirvió para una linda presentación de una competencia muy bien organizada. Ya la contrarreloj fue dura, exigente, con una vuelta que tuvo subida, viento y la hice con bicicleta de ruta, dando lo mejor y pensando en la tarde. Luego llegaron 115 kilómetros de una etapa nerviosa, con calles estrechas y cuidando no estar en las caídas. La s sensaciones iniciales no eran buenas, pero mejoraron en el cierre y pude moverme adelante y llegar bien”, resumió Franco sus dos primeros días en territorio polaco.

“El sábado fueron 140 kilómetros con el protagonismo de la montaña. Las sensaciones fueron muy buenas, peleando por estar adelante y el equipo quedó muy conforme. La lluvia hizo complejo el paso a alta velocidad, hubo que poner por momentos la cara al viento, trabajar de la mejor manera para el equipo y dejar todo, en especial en la última subida. Dimos todo y llegamos con tranquilidad a la meta por sentirme satisfecho con el trabajo. El domingo, el día de cierre, fue duro, con mucho frío y lluvia. Costó. Creo que no comenzó tan despierto, desde atrás, pero pensé que se podía y salí a dar lo mejor. La ruta era estrecha, empinada y hubo fugas, el pelotón se partió en grupos y creo que quedamos en un tercer grupo que trabajó por conectar, pero no pudo. Hicimos todo el esfuerzo, dimo lo máximo y busqué llegar a la meta, pero quedé fuera de carrera junto a otros chicos. Pese a ello quedé muy feliz, contento por el trabajo realizado y ya pensando en lo que se viene. Hay que corregir, seguir trabajando mucho y aprender”, concluyó el joven roquense.

En el final, Franco agradeció todo el apoyo que llega a diario desde casa y la región. “El agradecimiento es para todos. Para mi familia que hizo un gran esfuerzo para que esté acá y que siempre alienta, apoya y acompaña. Para mi entrenador, Cristian Maricán, quien me acompaña con la planificación y los consejos. Y para todos los que manda aliento y los mejores deseos. A todos muchos gracias”, cerró el ascendente ciclista que ya le apunta a un nuevo desafío en el Viejo Continente. (TodoRoca.com)