Entre el humo y el calor, viven acorralados por un horno de ladrillos

Durante varios días de esta semana, el termómetro no bajó de los 38°. Pero los vecinos que residen en la Toma de Barrio Nuevo aseguran que la temperatura aumenta todavía más porque que a pocos metros del barrio hay una "chimenea" de un horno de ladrillos que durante varios días estará encendida.

"Van a tenerlo prendido no menos de tres días. Usted se imagina que al calor debemos sumarle la temperatura del horno. Nosotros vivimos a unos cien metros y no podemos soportar ni el humo ni el calor", dijo un vecino, quien aseguró que ya han realizado los reclamos al área de Medio Ambiente y no recibieron respuestas.

Es que al parecer, el propietario de los hornos ya fue intimado en varias oportunidades a que desarrolle su labor en otro sector y desmantele la "cocina de ladrillos" que funciona a pocos metros de calle Urquiza.

Una mamá de esa zona reveló que en la barriada hay muchos chicos y adultos.

"La verdad que a esta hora no podemos respirar. Así vamos a estar al menos durante tres días hasta que se terminen de cocinar los ladrillos. Imagine que no podemos soportar las altas temperaturas", dijo una mamá de tres pequeños que vive en la zona y solicitó la intervención de autoridades municipales y sanitarias, ante el peligro de la situación.

Hasta hace poco tiempo, en ese sector funcionaban varios hornos de ladrillos aunque paulatinamente fueron trasladados a otros sectores por la contaminación ambienta.

"Yo no sé la temperatura que tenemos acá pero es mucho y los que más lo sufren son los niños", explicaron. (TodoRoca)